Gustavo Voisard Rastelli tiene 44 años y vive en Rafaela, provincia de Santa Fe. Un accidente, a los 35 años, le ocasionó una lesión medular que cambió su vida. Nos cuenta para “Capacidad en Primera Persona” su amor por las motos y sus futuros proyectos.
Toda mi vida ha girado alrededor de las motos, a los 18 pude costearme mi primer ciclomotor, organicé y participé de encuentros de motocicletas en todo el país. Luego del accidente mi panorama cambió y empecé a preocuparme por cómo ayudar a personas con discapacidad similares a las mías.
Con un grupo de amigos venimos trabajando en diferentes proyectos, entre ellos, por la aprobación de una licencia de conducir para vehículos adaptables con tres ruedas, para personas con discapacidad motriz, ya que la licencia actual es para vehículos adaptados con cuatro ruedas.
Además venimos peleando por la creación de una Ley Nacional de Adaptación de Vehículos donde los responsables de la verificación vehicular tengan las herramientas y los conocimientos necesarios para controlar que las adaptaciones sean correctas.
Estuve reunido con personas de ITEC (Instituto Tecnológico de Rafaela) para un futuro proyecto donde nos prestarían sus talleres y conocimientos para realizar prótesis y adaptaciones de vehículos para personas con discapacidad.
Con referencia a mi sueño de motoquero tengo una motocicleta pequeña adaptada en la cual recorro las rutas del país. Para fines de este año comenzaré la adaptación de un vehiculó mayor que cumpla la normas de tránsito de los Estados Unidos. La idea es recorrer en el mes mayo del 2019 la famosa Ruta 66, los 4656 km desde Detroit hasta Los Ángeles donde me sumare, junto a una enfermera, a un grupo de personas que recorren esta ruta. Está la posibilidad de que se sumen algunos argentinos a esta travesía.
Iremos contando el día a día de esta aventura por las diferentes redes sociales y por supuesto en la plataforma social de Por Igual Mas.
El objetivo principal es marcar un precedente y confirmar que las personas con discapacidad podemos hacer todo lo que nos proponemos, tal vez a otro ritmo, pero con la convicción que en la vida nada es imposible.
Por Víctor José Álvarez Díaz
Equipo de Prensa
Fundación Por Igual Más
Colabora en edición Sofía Rodríguez Galván
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