Para nuestra columna de Glosario social, nos quedamos con la palabra Iván, ya entrevistado para Primera Persona, quien ahora nos habla sobre el tema de la discapacidad, definición y el encuentro con la sociedad.

Todo nace desde la capacidad, antes que la “dis”. Si bien puede ser cierto que la discapacidad es un limitación que pueda acompañar a la persona durante su vida, atrás se esconden las virtudes que uno debe encontrar, nos resalta Iván.

De todas las definiciones que circulan, para nuestro entrevistado, la más adecuada es personas con discapacidad. Capacidades especiales no, ya que como él nos dice, ver poco no tiene nada de especial, capacidades diferentes tampoco ya que no cree que exista diferencia con las otras personas. El término es discapacidad, y aunque a veces pueda sonar “un poco duro”, dice Iván, es el adecuado ya que si no se estaría disfrazando y cayendo en un aspecto de piedad para con la persona que la posee. “A las cosas por su nombre” agrega.

Iván, con sus compañeros de guía en el Jardín de Los Sentidos

La sociedad muchas veces limita, no ayuda tanto como debería hacerlo. Aunque a veces también nos falta a nosotros como colectivo la capacidad de movilización; solemos quedarnos callados. La persona con discapacidad no debe quedarse en silencio, no debe faltar el respeto pero tampoco callarse, “tiene que hacerse oír, no como discapacitado, sino como persona” nos acentúa.

“Si uno no se despierta, no se mueve, no busca, no consigue absolutamente nada”, continúa Iván y suma: “siempre fuimos los últimos, y algún día los últimos tenemos que ser los primeros, con respeto, igual que los demás. Iguales que los demás, con derechos y obligaciones”.

Cuando realiza las notas en la radio que oficia como locutor, cuenta que van muchas personas con discapacidad que realizan cosas maravillosas, hacen un trabajo extraordinario pero que no siempre llega a conocerse o divulgarse ya que no hay interés por parte de los medios más importante en comenzar con esta tarea. Sin embargo, él tiene esperanza que de a poco “poquito”, en sus términos, la situación pueda revertirse.  

Rescatamos como conclusión que aunque la situación actualmente es difícil en general y más aún,en el ámbito de discapacidad, hay mucho trabajo por hacer para mejorar esto y “abrir el juego” para más personas que también tienen, como nos dice Iván, con derechos y obligaciones.

Por Mauricio Alarcón

Equipo de Prensa

Fundación Por Igual Más

Colabora en edición Sofía Rodríguez Galván