En esta columna queremos que conozcas a Camila Magnone, oriunda de Río Ceballos, Córdoba. Tiene retraso mental madurativo ocasionado, en parte, por la desnutrición severa que sufrió los primero días de vida. La lectura, su principal pasión, junto con su gran tenacidad, compromiso y el amor de su familia llevaron a que publicara un libro para adolescentes ¡Te invitamos a conocerla!
(Arriba: Imagen de la solapa de presentación de Camila en su novela : «Amor de invierno» donde está su biografía y una foto de la autora)
Todo comenzó gracias a mis padres. Desde chica me estimularon a la lectura, un mundo donde la imaginación no tiene límites, y logré potenciar algo que no es una dificultad para mí. Mientras cursaba el quinto año del secundario en el Anexo Villa Los Altos de Salsipuedes, dediqué mis horas libres a escribir.
Lo que empezó como una simple actividad para la asignatura Lengua se convirtió en una meta el día en que mi profesora, Natalia Sánchez Freytes, me dijo: “Cami, tenés que escribir tu historia”. Inspirada en libros juveniles y en mi escritora favorita, Cathy Hopkins, logré plasmar en Amor de Invierno un relato adolescente, que lo lleva a uno a “reflexionar sobre los amigos, los sentimientos, la lealtad…”, como la misma contratapa indica. Tardé dos años en escribirlo, empecé a mano y, cuando la cantidad de páginas aumentó, decidí volcarme a la computadora.
( Arriba: Camila muestra su libro)
La historia transcurre en los inviernos helados de New York, trata problemáticas como la inmigración y la competencia entre adolescentes, además, es un reflejo de mi propia experiencia. Jamás tuve noción de que me convertiría en la escritora de la familia y, menos, que el libro iba ser tan completo, tuve continuidad y permanencia, sin olvidar el esfuerzo no solo mío, sino también de mis padres. Costó mucho concretar el proceso final con la editorial y demostrar que dentro de mis dificultades tengo el valor de poder hacer frente a cualquier obstáculo. El resultado final superó mis expectativas: exponer mi trabajo en la Feria Anual del Libro.
La crítica fue más que positiva, el libro motivó a los jóvenes a que se inicien en la lectura y por qué no, a escribir sus propios relatos. Mi objetivo a futuro es tratar de implementar el libro como material de trabajo en los colegios secundarios. Es importante enseñar que somos capaces de lograr cualquier cosa que nos propongamos, todos tenemos algún talento oculto, solo es necesario descubrirlo y abocarse con energía.
(Arriba: Tapa del libro «Amor de invierno» de Camila Magnone)
Actualmente, me encuentro escribiendo mi segundo libro. Una trama que si bien cuenta con algunos personajes de la primera edición, es un relato completamente diferente. Alice, el personaje principal, una neoyorquina que sueña con ser cantante, deberá superar infinitas barreras para lograrlo. Ambas historias transcurren en New York, pero debo confesar que no lo conozco. Todo es producto de mi imaginación y de los libros y las series que sigo. Estoy segura de que algún día tendré la oportunidad de visitarlo y ver en persona todos los lugares donde mis personajes viven sus aventuras.
Mucha gente lucha día a día para poder sumar un poco más a su vida o está socialmente postergada. A ellas quiero decirles que lo intenten, que se animen a equivocarse. Todo requiere de sacrificio y dedicación, pero las dificultades preparan a las personas para resultados extraordinarios. Cada uno tiene sus propias limitaciones, en mi caso logré sortearlas con la escritura. Disfruto volcar historias en el papel, una pasión que terminó siendo mi vocación y ejemplo para muchos.
Por Belén Vega y Camila GIorgi
Equipo de Prensa
Fundación Por Igual Más
Colabora en la edición: Miriam Coronel
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